miércoles, 22 de mayo de 2013

Sat by the river and it made me complete




No debería escribir hoy, no con tantas cosas que tengo por hacer… No has llegado en un buen momento. Supongo que, si me paro a pensarlo, nunca llegamos a encontrar el momento óptimo, ni mucho menos el más acertado.  Tal vez ése fue el comienzo de mis errores, o tal vez no tengo ningún motivo para comportarme como lo hice.
A veces siento que no merezco lo que tengo, sólo por el hecho de habérselo quitado a una persona a la que apreciaba aprecio increíblemente…
"Sólo quería saber cómo estabas" , había dicho.
Sólo eso, pero en mi mente ya corrían las imágenes una detrás de otra. De todo. Con una canción de fondo, siempre la misma. Una canción que, sin haberlo querido, recopilaba cada momento que se había vivido, que nos aislaba del mundo, limitándolo todo a las orillas de un río con bañistas eventuales poco lúcidos en cuanto a nombres se refiere...

Cómo me jode que me duelan cosas que deberían haber sido olvidadas hace ya mucho tiempo... Cómo me jode todo esto... 

Escribiría mil palabras, pero un día alguien me dijo que no era la cantidad de lo escrito, sino lo que transmitía... a mí me queda el recuerdo de un LP grabado en la piedra...

domingo, 12 de mayo de 2013

UGLY

Querida Ugly...
Recuerdo el día que naciste. El 17 de junio de 2009. Dios.... ya hace casi cuatro años de eso... No queríamos más gatos, ¿recuerdas? Con tu mamá ya era suficiente para un piso tan pequeño... Nadie te quiso, porque eras la menos bonita, la de los ojos tristes, la del color indefinido... Y sin embargo, eras mi favorita. No sabíamos cómo llamarte, ¿recuerdas? Aún me río cuando me viene a la mente la tía Pili... "Llámala Correcaminos... o Beep-beep!" ... y al final te quedaste con el nombre que menos justicia te hacía... Ugly, la gata más bonita de la urbanización... Los niños jugaban contigo, ¿recuerdas? Y te pasabas las mañanas corriendo por allí, de arriba a abajo... Y cuando llegaba del Instituto, allí estabas tú esperándome, maullando, corriendo entre mis piernas hasta la puerta de casa...
Siempre querías que estuviese pendiente de ti, ¿recuerdas? Te sentabas encima de mis apuntes incluso en selectividad, me obligabas a quererte... Nos obligaste a toda la familia. Con tus ojos tristes, con tu color indefinido...
No sabes lo mucho que te echo de menos por las noches, cuando recuerdo cómo te tumbabas en mi pecho y apoyabas la cabeza en la almohada... conmigo siempre.... Ojalá te hubieses podido venir conmigo... Ahora seguirías a mi lado...
No sabes cuánto te quería... Ni cuánto te quiero...
Te ganaste el amor de todos los miembros de la familia...

.... No te olvidamos, pequeña... No nos olvides tú a nosotras...

Slavery


Hoy te he sentido lejos, mucho. Como si tres mundos nos separase, aunque nuestras mentes sigan igual de acompasadan... Como si siguiésemos latiendo a un mismo ritmo, pero sin poder demostrarlo... Antes no era así, ¿recuerdas? Antes nos veíamos. Antes nos mirábamos, y sabíamos lo que la otra pensaba... y sonreíamos. A la vez. Siempre ha sido así...
Hay momentos en los que me pregunto si te acordarás de mí de la manera en que yo me acuerdo de ti, si mirarás las fotos, las cartas, los recuerdos narrados en un viejo cuaderno...
Te echo tanto de menos... A veces me gustaría dejarlo todo, todo, para aparecer en tu ventana y obligarte a sonreír. A recordarte que no hay motivos para estar triste, aunque yo no sepa hacer otra cosa que llorar cuando las cosas se complican... Siento que me falta la fuerza para luchar con esta situación. Con esta distancia que me afecta tanto sin necesidad... Porque te tengo al lado, y no puedo verte. No puedo abrazarte. No puedo verte sonreír... Creo que eso es lo que peor llevo... Tú sonrisa. Joder...

Me siento como una esclava... Una esclava de tu sonrisa. Como siempre lo he sido... Como siempre lo seré...

jueves, 2 de mayo de 2013

"Mark as Spam"

El viento le trajo noticias de Mark y Shane una vez más. Una pequeña carta, como un mensaje en la bandeja de entrada, sólo para Alice. Él decía que Shane estaba triste y que pensaba que sólo ella, sólo Alice, podría ayudarla. Eso no le pareció mal, en realidad. A Alice le daba igual que él se preocupase por Shane, allá él con cuanto quisiese hacer.

La carta, sin embargo, fue cambiando su rumbo. Mark hablaba de una realidad anterior a la propia Alice, de una niña de pelo rosa cuya única preocupación probablemente fuese que la gente de su alrededor sonriese...
Tampoco recuerdo mucho de ella, en realidad.

Las palabras de Mark le hacían reír. Él seguía intentando entender a Alice por medio de unas frases escritas tras el viento sin ninguna intención más que la de válvula de escape, la de descanso entre todo lo que nos rodea. Avanzó poco a poco en la pseudocarta, esquivando los pequeños ataques que eran sus indrectas, observando los argumentos que Mark daba a ciegas, hasta que llegó a la única frase que no esperaba leer allí. La única frase que no tenía derecho a escribir... ni siquiera tenía derecho a tener ese concepto en mente. Se detuvo de golpe. Todo se congeló. "Esto no es la Ciudad de Mentiras de la que procedes. Sé consecuente".
Empalideció. ¿Ciudad de Mentiras? ¿Qué sabría él de la Ciudad de Mentiras? ¿Quién se creía para intentar juzgar un lugar cuya procedencia y funcionamiento desconocía? ¿Qué sabría él...?
Por encima de todo, una duda asaltó la mente de Alice... ¿qué sabría ella de la Ciudad de Mentiras? Ni siquiera estaba segura de pertenecer aún a ella..
o de si alguna vez había llegado a pertenecer a aquel lugar realmente... Nunca entendió del todo lo que pasaba en ella, ni quiénes eran los que la rodeaban... Pero sabía ver la verdad en las palabras que Chris escribía.... O eso esperaba, tantos años después.

... Eso tendría que hablarlo con Chris... Era su ciudad. Yo sólo creo ser una doble más de una historia sin un final cerrado...

... Real o no, la aquella Ciudad que Chris construyó era lo poco que a Alice le quedaba de él... Y ningún gato iba a decirle a dónde pertenecía, o dejaba de pertenecer.

Mierda. No quería pensar en él.